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2-Istoria ramane pasiunea mea nr-1.
13 de junio de 40. Nace Cneo Julio Agrícola, el hombre que casi conquista toda Britania... y los motivos que llevaron a Domiciano a abandonarlas.
1º Agrícola pertenecía a esa familias galas que recibieron la ciudadanía romana de Julio Cesar o de Augusto (de ahí el nomen de Julio) y ascendieron al Senado. Que fuese designado gobernador de Britania no debió ser casualidad, sino por su experiencia previa: fue tribuno militar entre el 58-62 bajo Suetonio Paulino, sofocando en la rebelión de Boudica. Partidario de Vespasiano en la guerra civil del 68-9, fue destinado hacia el 70 de nuevo en Britania, al mando de la Legión XX Valeria; entre el 71-4 sirvió bajo el gobernador Petilio Cerialis, yerno de Vespasiano, que lanzó tres campañas contra los Brigantes (en la hoy zona norte de Inglaterra), sometiéndolos.
2º. Seguramente la influencia de Petilio fue lo que valió a Agrícola ser designado cónsul en el 77, y luego destinado como gobernador de Britania, donde permaneció 6 años (78-84) un período inusualmente largo, y lanzó anualmente campañas estivales contra los britanos:
La 1ª (año 78) implicó la conquista del norte de Gales y del centro de druidas de la isla de Mona (Anglesey).
La 2ª (79) conllevó la conquista del actual norte de Inglaterra,
La 3ª y 4ª (80 y 81) conllevó la conquista del sur de Escocia.
La 5ª (82) aseguró la costa de Britania y Caledonia (Escocia) frente a Hibernia (Irlanda) tanto por tierra como mediante una expedición naval.
3º La 6ª (83) fue la más memorable. Agrícola se adentró en el norte de Escocia, provocando la reacción de las tribus caledonias y pictas, que reuniéndose, formaron una hueste de unos 30.000 guerreros, incluidos los arcaicos pero temibles carros de guerra, que se enfrentaron a los 20.000 romanos en la batalla del monte Graupio. Agrícola colocó en el frente a sus auxiliares: 8.000 infantes y 3.000 jinetes, y en retaguardia a sus vexilationes o destacamentos de las legiones II, VIII y XX, y un alae de caballería, junto a los muros del campamento.
Tras un primer choque entre infanterías, los caledonios mandaron a sus caballería y sus carros de guerras. Pero las zanjas y trincheras construidas por los romanos detuvieron. Fue entonces cuando la horda caledonia se lanzó contra los flancos romanos al observar lo extendida de sus líneas. Pero Agrícola mandó a su caballería de reserva, forzando a los caledonios a replegarse en desorden, contagiando su caos y desmoralización al resto de la horda, que huyó. La caballería les persiguió, algunos valientes guerreros lanzaron cargas suicidas, y los romanos, incapaces de gestionar a tantos prisioneros, efectuaron una matanza con los mismos: 10.000 caledonios murieron. Es de notar que casi todo el esfuerzo de la batalla se debió a las tropas de auxiliares romanas.
La última campaña (84) implicó un avance hacia el norte, y las órdenes a la flota de apoyo que de circunnavegase Britania, para demostrar que era una isla, y no una península como se creían entonces. También al parecer planeaba una conquista de Hibernia (Irlanda) donde según decía, bastaría una legión con sus auxiliares.
4º. No fueron sólo conquistas, sino que según el historiador Tácito, coetáneo de los hechos, Agrícola desarrolló una intensa labor romanizadora, tanto construyendo templos, mercados y casas, como educando “a la romana” a los hijos de los nobles britanos. Pero entonces, el emperador Domiciano, por celos, ordenó a Agrícola regresar: sus victorias ensombrecían su triunfo sobre los germanos. Y por tanto, aunque le otorgó honores, se le relevó del mando, y Agrícola se retiró a la vida privada.
Pero Tácito es una fuente muy parcial: era el yerno de Agrícola, al que admiraba, escribió la biografía que es la principal fuente de información. Además, Tácito era senador, y todos sus escritos son muy hostiles a emperadores antisenatoriales como los Julios-Claudio, Vitelio o Domiciano. Y si obra está plagada de “se decía” o “se creía”. En un pasaje concreto dice “Se crecía (ya sea verdad, ya sea una historia inventada y creada de acuerdo al carácter del emperador)”... lo que deja en entredicho muchas de las aseveraciones que realiza.
5º. Lo cierto es que, seguramente, las campañas de Agrícola en Escocia resultaron muy caras y poco rentables. A sus 20.000 soldados se añadían los millares de animales de carga y remeros de las flotas. La dificultades logísticas para alimentarlos debió ser enorme... máxime cuando la agricultura en el norte de Britania y Caledonia no estaba muy desarrollada, y debían ser traídos de la Galia o más lejos (vino, aceite), aumentando los costes.. Según cálculos del libro “Las legiones en campaña” de Victor J. Sánchez Tarradellas, los 20.000 soldados de Agrícola hubiesen necesitado al año 6.500 toneladas de trigo (a unos 0,88 kg al día por hombre) y 4.500 de otros alimentos. A ello sumar la alimentación de las bestias, y todo lo necesario para la guerra (armas, metales, herramientas, cuero, vestimenta, tiendas de campaña, etc). Además, el botín que seguramente se obtuvo de las campañas fue escaso: no había grandes ciudades que saquear, los objetos de valor obtenidos serían pocos. El único bien con cierto valor eran los esclavos, pero su traslado hasta las zonas de venta implicaría más costes; y dada la escasez de conocimientos artesanales o agrícolas sofisticados de esos esclavos (no conocería el cultivo de la vid o el olivo)... su precio de mercado tampoco sería muy alto. En definitiva: es dudoso que el botín obtenido superase los gastos de la guerra.
6º. Y por otro lado, una cosa era conquistar un territorio... y otro mantener la conquista. Tener subyugados a los caledonios, hacerles cumplir las leyes romanas y entregar los tributos hubiese exigido la presencia de un ejército romano... y dada la geografía del territorio, también una flota. Por el escaso desarrollo agrícola y urbano, esas legiones y flotas tendrían que ser continuamente abastecidas desde el sur de Britania y desde la Galia o más lejos, lo que incrementaría los costes. Y siendo previsible que los caledonios se rebelase, mantenerlos sometidos exigiría continuas campañas. Y es altamente dudoso que cualquier tributo que los caledonios pudiesen pagar compensase los gastos de la ocupación. Al final, la economía del Imperio radicaba en un gobierno que detraía recursos y tributos de las provincias más ricas (Bética, Egipto, África, Sicilia, Asia Menor...) para gastarlos en las legiones estacionadas en la frontera, desarrollándose unos circuitos comerciales para el retorno y flujo de ese dinero. Las guerras, para resultar beneficiosas, requerían un botín que revertido y reinvertido en las provincias(en forma de construcciones, fundación de ciudades, etc) compensasen a su economía de los recursos detraídos para la guerra. Es dudoso que Caledonia e Hibernia pudiesen ofrecer nada de eso al Imperio. Domiciano, siguiendo la política económica de su padre Vespasiano, administró el Imperio de forma prudente: el historiador Suetonio es casi lo único bueno que dice de Domiciano, que nunca estuvo el Imperio mejor administrado que bajo su gobierno; y de hecho, bajo el gobierno de Domiciano, el denario alcanzó su mayor contenido en plata. Por tanto, las conquistas del norte de Britania no le compensaban, y por eso se abandonaron; no en cambio las conquistas de Gales, donde las minas metalíferas sí hacían rentable la ocupación.
PD. Espero que les haya gustado y que hayan aprendido algo. A los que os interesen, es importante que le deis a “seguir” o “me gusta” a la página original, para que el algoritmo os la muestre, y porque no siempre tengo de publicarlas en todos los grupos. Os dejo el enlace: https://www.facebook.com/profile.php?id=100085345680077 Gracias por leerme. Atentamente, el autor ©Jose Miguel Delgado Valerio.
Fuentes clásicas: “Vida y muerte de Agrícola”, de Cornelio Tácito.
Fuentes modernas: “Los Flavios” de F.J. Lomas, serie Historia del Mundo Antiguo nº 49, Editorial Akal. “Las legiones en campaña”,de Víctor Sánchez Tarradellas.
En las imágenes. 1º Batalla del monte Graupio. 1ª fase: los auxiliares bátavos atacan a la vanguardia caledonia y la hacen huir. Autor: Seán Ó'Brógáin. 2º Mapa de las campañas de Agrícola, basado en Tácito y The iron age commnunities in Britaindel arqueólogo Barry Cunliffe. 3º Áure de Vespasiano, el emperador que envió a Agrícola (78) como gobernador de Britania. 4º Áureo de Domiciano, hijo de Vespasiano, el emperador que relevó a Agrícola como gobernador de Britania (85) (2º, 3º y 4º de Wikipedia Commons)