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2-Istoria ramane pasiunea mea nr-1.
26 de septiembre -46. Desfiles triunfales de Julio Cesar.
En el -60, Julio Cesar había tenido que renunciar a su triunfo hispano por las maniobras de sus rivales para poder presentarse a cónsul. Por ello, en el -46, cuando regresó a Roma tras vencer Metelo Escipión y los republicanos en Tapso, organizó con esmero los cuatro triunfos que el Senado le otorgó (uno más que los celebrados por Pompeyo), y que celebró en días no consecutivos del 21 de septiembre al 2 de octubre.
El 1º triunfo se celebró sobre la guerra de las Galias(-58/-51) fue apoteósico. Carretas con el botín y armas capturadas al enemigo (como un exótico carro de guerra britano); dibujos y maquetas de las principales batallas (como el asedio de Alesia). Los carteles indicaron la cifras de muertos (entre 400.000 y 1 millón) y esclavos vendidos (1 millón) y ciudades conquistadas; y aunque sin duda exageraron (para magnificar la victoria), da una idea del inmenso impacto que tuvo la guerra de las Galias. El espectáculo central fue el rey galo Vercingétorix, líder de la gran rebelión del -52, y que fue ejecutado. Y el espectáculo final fue el propio Cesar sobre el carro triunfal precedido por el inmenso honor (otorgado por el Senado) de ser escoltado por 72 lictores (el triple que un dictador y 6 veces más que un cónsul). Pero Cesar tuvo un mal presagio: al pasar su carro junto al templo de la Fortuna (levantado por su odiado rival Lúculo) su carro se rompión y lo arrojó al suelo. Pero el genio de Cesar le hizo expiar el mal presagio ascendiendo de rodillas los numerosos escalones de la cuesta que separaba el Foro del templo de Júpiter en el Capitolio.
El 2º triunfo, por la campaña egipcia o “guerra de Alejandría” (-48/-47), no fue tan afortunado. Cesar hizo desfilar a Arsínoe, la hermana y reina-rival de Cleopatra. Cesar pretendía tener el honor de mostrar a otro rey extranjero vencido. Pero era la primera mujer mostrada en un triunfo como enemigo principal, y ver a una joven cargada de cadenas, movió a la compasión del público, y Cesar, forzado por la opinión pública, la perdonó, exiliándola en Éfeso.
El 3º triunfo se celebró por la campaña contra el rey Farnaces del Ponto (-47) que trató de recuperar el antiguo reino de su padre Mitrídates, aprovechando el caos de la guerra civil. Julio Cesar exhibió un gran cartel con la frase “Veni, vidi, vinci”, pronunciada por su rápida y fácil victoria sobre el rey.
El 4º triunfo fue el más polémico. Formalmente se celebró oficialmente por la victoria (-46) contra el rey Juba de Numidia... pero encubría una victoria sobre romanos en una guerra civil (Juba apoyó al bando republicano-pompeyano), algo nunca antes visto, con referencias explícitas en los cuadros que mostraban a Metelo Escipión y a Catón el Joven suicidándose, lo que provocó quejas entre los asistentes. Además, dado que Juba I también se suicidó, hizo desfilar a su hijo Juba II, un niño de pocos años, cargado de cadenas, lo que provocó la compasión de la multitud.
Durante los triunfos también tuvo que soportar las habituales burlas de los legionarios en sus canciones hacia sus generales. La advertencia a los ciudadanos de que escondiesen a sus mujeres porque traían al “adúltero calvo” que se había gastado en mujeres todo el dinero de las Galias le debió divertir. No tanto las burdas referencias al infundio lanzado por sus rivales de su aventura con el anciano rey Nicomedades de Bitinia, diciendo que “Cesar sometió a los galos y Nicomedes a Cesar”... y mucho menos la referencia a su golpe de Estado, indicando que “si obras bien serás castigado, si obras mal serás rey”.
Al final, nada de ello impactó demasiado, porque los festejos hacían olvidar tales cuestiones. A parte de los lujosos banquetes para las multitudes (con 22.000 mesas provistas de los mejores vinos y manjares), y las competiciones de gladiadores y carreras de carros, hubo elementos novedosos o poco habituales. Dion Casio dice que hizo construir un “teatro de madera” doble que se llamó “anfiteatro” al tener “escaños alrededor por todas partes y no tenía escenario” para celebrar las “venationes” o luchas de fieras, en donde murieron 400 leones, y por vez primera se introdujo lo que Dion llama “camellopardo”, un camello con piel de leopardo y extremidades y cuello largo que por la descripción sólo puede ser una jirafa. También celebró una batalla naval creando un canal inundable en el campo de Marte, y un combate simulado entre dos ejércitos de 500 infantes, 30 jinetes y 20 elefantes.
Los festejos fueron completados con donaciones materiales: repartió al pueblo de Roma grano y aceite de oliva, así como 400 sestercios por cabeza, y un generoso reparto de botín a sus legionarios, dándoles 20.000 sestercios (su estipendio era de 450, aunque Cesar lo aumentó a 900); los centuriones recibieron 40.000 y los tribunos y prefectos 80.000.
La multitud que acudió a verlos fue tal que Roma no dio abasto para alojar a los visitantes, que se alojó en tiendas de campaña improvisadas. La multitud y la bebida ocasionaron disturbios: hubo muertos (incluidos 2 senadores) en una avalancha, y Cesar hizo ejecutar a algunos alborotadores: 2 lo fueron ritualmente por el Flamen martialis (sacerdote del dios de la guerra) en el Campo de Marte, exihibiéndose sus cabezas en el Foro.
Como evento final, Julio Cesar dedicó el 26 de septiembre del -46el templo a Venus Genitrix (la generadora o madre), prometido en la batalla de Farsalia. Julio Cesar proclamaba descender de la diosa. En el fondo, los Julios, una familia patricia antigua pero menos poderosa que otras, necesitaba realzarse: los Valerios y los Escipiones nunca tuvieron que recurrir a tales leyendas para encumbrarse. Pero Julio Cesar puso énfasis en ello, para dotarse un aura semidivina... que su hijo adoptivo Augusto completó cuando divinizó a su difunto padre como el Divvs Ivlivs, el Divino Julio.
PD. Espero que les haya gustado y que hayan aprendido algo. Si queréis ayudarme, podéis compartir la publicación desde la página original. Gracias por leerme.
Atentamente, el autor ©Jose Miguel Delgado Valerio.
Fuentes clásicas. Plutarco: Vida de Julio Cesar. Suetonio: Vida del divino Julio. Dion Casio. Historia romana. Libro 43.
Fuentes modernas: Adrian Goldsworthy. Cesar.
Imágenes (Autor: Peter Connolly): 1º triunfo de César
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